Enclavada en el corazón de la cordillera Central, San José de Ocoa luce imponente ante el reto de desarrollar el turismo como fuente de ingresos. Después de 3 décadas de ponderaciones, gestiones legales y desarrollo de su potencial, la zona comienza a dar señales inequívocas de una actividad turística naciente. La inversión privada así lo confirma.
Con temperaturas que pueden bajar de -0 grados Celsius y una altura sobre el nivel del mar que ronda los 1,000 metros, la montañosa zona de Tatón se perfila como el buque insignia del turismo en la zona.
Así lo confirma la construcción de varios establecimientos dedicados al alojamiento, la recreación, el ecoturismo, la aventura y los eventos sociales.
La celebración del evento de modas Festival del Cerezo ha concitado en sus dos entregas el apoyo de cientos de visitantes, quienes reciben con beneplácito este baño de naturaleza, matizado por bajas temperaturas y hermosos paisajes.
Varios proyectos privados preparan sus espacios de alojamiento para aumentar la capacidad de recepción de turistas, amigos de nuestros ecosistemas y de las aventuras al aire libre.
Pero no solo es Tatón. Existen otras zonas de singular belleza, arraigo histórico y facilidad para
las ecoaventuras. El valle de Rancho Arriba es un ejemplo de esto.
El antiguo lago, identificado por el cronista de Indias Pedro Mártir de Anglería, albergó gran parte
de nuestros aborígenes y todavía conserva en su suelo una considerable muestra de remanentes indígenas.
Además, su fertilidad y sus grandes extensiones de invernaderos la convierten en una capital agrícola de singular importancia, para quienes practican el agroturismo o para aquellos que disfrutan de la vista panorámica de esos mares de plástico y sembradíos al aire libre.
En sus predios se destacan lugares boscosos y misteriosos como La Bocaina, invitando a un cercano contacto con nuestras raíces.
SEPA MÁS
Gestiones
La ley 151-04 designa a San José de Ocoa como provincia ecoturística. Amparado en esta se creó un consejo ecoturístico junto a sus dependencias administrativas. Aunque el incentivo económico derivado de dicha ley es limitado, durante los primeros 9 años de funcionamiento se ha promocionado la provincia y se ha logrado darla a conocer, entre otros avances.
Actualmente cursa en el Congreso Nacional un ambicioso proyecto de ley que, de aprobarse, destinaría cuantiosos recursos para incentivar el desarrollo ecoturístico de San José de Ocoa. Pero más allá de la inversión oficial, el desarrollo del turismo en Ocoa requiere de la inversión privada. Este es un buen momento para invertir. El futuro luce prometedor.
