Una delegación del Congreso de Estados Unidos inspeccionará el sábado el Centro de Detención de Irwin, en el sur de Georgia, para investigar las múltiples denuncias de mujeres inmigrantes que aseguran haber sido sometidas a histerectomías y otros procedimientos médicos sin su consentimiento.

La oficina del congresista demócrata Joaquín Castro, presidente del Caucus Hispano en el Congreso, informó este jueves que la comitiva de 12 miembros de la Cámara de Representantes también “evaluará las condiciones relacionadas con la propagación de la COVID-19, con más de 40 casos confirmados del virus en los últimos meses”.

La delegación está conformada por miembros del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, entre ellos Sheila Jackson Lee (Texas), Henry C. “Hank” Johnson (Georgia) y Pramila Jayapal (Washington), y del Caucus Hispano, como Castro (Texas), Nanette Díaz Barragán (California) y Adriano Espaillat (Nueva York), entre otros.

De acuerdo con la representante Jayapal, quien ha pedido una investigación congresional sobre la situación en Irwin, puede haber “al menos entre 17 y 18 mujeres” que fueron sometidas a procedimientos médicos ginecológicos innecesarios en ese centro, “a menudo sin el consentimiento o el conocimiento apropiado, y con la clara intención de esterilización”.

Tras la visita el sábado en la mañana, la comitiva tiene previsto celebrar una conferencia de prensa telefónica “para compartir con el público” los hallazgos de la inspección en esa cárcel, ubicada en la localidad de Ocilla, al sur de Atlanta.

Los congresistas dijeron en un comunicado que la situación que viven los indocumentados bajo la custodia del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) representa una prioridad para ellos y que desde el comienzo de la pandemia de COVID-19 han inspeccionados centros de detención en Texas y Nevada y alertado sobre la propagación del virus en esas instalaciones.

“El Caucus Hispano y el Comité Judicial de la Cámara continuarán trabajando para detener la propagación de COVID-19 dentro de las instalaciones del ICE y para responsabilizar a las agencias gubernamentales como el ICE por cualquier abuso cometido contra los inmigrantes bajo su cuidado”, agregaron.

El escándalo en Irwin se destapó la semana pasada luego de que varias organizaciones de derechos humanos, entre ellas Project South y Government Accountability Project, presentaran una queja ante la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para denunciar una serie de prácticas peligrosas que ocurren en la prisión de Irwin.

La denuncia está basada, principalmente, en el testimonio de Dawn Wooten, una enfermera que trabajó en esa cárcel, que expresa su preocupación por el “alto número” de mujeres presas que habían sido sometidas a histerectomías, una cirugía para extirpar el útero, y que muchas de ellas ni siquiera entendían el motivo de la operación.

Diversas fuentes, entre abogados, activistas y mujeres que han estado presas en Irwin, identificaron al médico que realizó las cirugías como Mahendra Amin, un especialista en obstetricia y ginecología en Douglas, Georgia. Aunque Wooten no lo identificó por su nombre, se refirió al médico como un “recolector de úteros” porque “sacaba todo de adentro”.