El aumento de la demanda de pescado y el estancamiento de la producción pesquera han incrementado la responsabilidad de la acuicultura como fuente de productos marinos. En este sentido, ante la necesidad de desarrollar estrategias de producción acuícola sostenible, para minimizar su impacto sobre el medio, evitando así la sobreexplotación de los recursos, surge el proyecto BIOSHELL, cuyo fin es el diseño y la instalación de un biofiltro para la depuración de agua de acuicultura con relleno de material residual acuícola, como es la concha de mejillón. El objetivo final es reducir el consumo de agua en este sector.

La Universidad de Valladolid (UVa), a través del Instituto de Procesos Sostenibles, y la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescados (ANFACO-CECOPESCA), todas estas entidades en España, se han unido en el proyecto BIOSHELL.

Este proyecto, coordinado por ANFACO-CECOPESCA, con la colaboración del Instituto de Procesos Sostenibles, se enmarca en la convocatoria para el fomento e impulso de la sostenibilidad pesquera y acuícola, dentro del Programa pleamar, cofinanciado por el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP), con el apoyo del Ministerio para la Transición Ecológica, a través de la Fundación Biodiversidad.

En el desarrollo del proyecto, se estudiará el funcionamiento del sistema de biofiltro sostenible con conchas, a escala laboratorio, analizando las diferencias respecto a un filtro control como los que se emplean en sistemas convencionales. Con los resultados obtenidos de este primer estudio, la Universidad de Valladolid realizará el diseño del equipo a escala piloto, que se implementará in situ en las instalaciones del Grupo Tres Mares para estudiarlo en condiciones reales.