Unos científicos han calculado las medidas corporales de individuos del género Homo cuyos restos fosilizados provienen de diversas partes del mundo. Tras combinar estos datos con una reconstrucción de los climas regionales del mundo durante el último millón de años, han buscado correlaciones entre el clima de cada época y lugar y el tamaño del cuerpo y el del cerebro de los individuos que vivieron en esos sitios y épocas.

El estudio lo ha realizado un equipo que incluye a Andrea Manica, de la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, y Manuel Will, de la Universidad de Tubinga en Alemania.

La investigación revela que el tamaño promedio del cuerpo de los humanos ha fluctuado significativamente a lo largo del último millón de años, con una clara tendencia hacia cuerpos más grandes en las regiones más frías y cuerpos más pequeños en las regiones más cálidas. Se cree que el sentido evolutivo de un mayor tamaño corporal es que actúa como amortiguador del frío: se pierde menos calor de un cuerpo cuando su masa es más grande en relación con su superficie.

Nuestra especie, el Homo sapiens, surgió hace unos 300.000 años en África. El género Homo existe desde hace mucho más tiempo, e incluye a los neandertales y a otras especies emparentadas extinguidas, como el Homo habilis y el Homo erectus.

Un rasgo que define la evolución de nuestro género es la tendencia a aumentar el tamaño del cuerpo y el del cerebro; en comparación con especies anteriores como el Homo habilis, somos un 50% más pesados y nuestro cerebro es tres veces mayor. Pero las causas de estos cambios han sido tema de debate durante mucho tiempo