Los animales anfibios y también algunos otros que no lo son pueden pasar rápidamente de caminar a nadar si es necesario, y, obviamente, sus cuerpos no experimentan transformación alguna. La mayoría de los robots son incapaces de hacerlo.

 

El equipo de Dinesh K. Patel y Carmel Majidi, de la Universidad Carnegie Mellon en Estados Unidos, ha creado robots blandos que pueden pasar fácil y rápidamente de caminar a nadar, por ejemplo, o de gatear a rodar.

 

«Nos inspiramos en la naturaleza para desarrollar un robot capaz de realizar distintas tareas y adaptarse a su entorno sin añadir actuadores ni aumentar su complejidad», explica Patel. «Nuestro actuador biestable es sencillo, fiable y duradero, y sienta las bases para futuros avances en robótica blanda dinámica y reconfigurable».

 

El actuador biestable está hecho de caucho blando impreso en 3D que contiene muelles hechos de una aleación con memoria de forma que reaccionan a las corrientes eléctricas contrayéndose, lo que hace que el actuador se doble. El equipo utilizó este movimiento biestable para cambiar la forma de los actuadores y así, indirectamente, la de los robots. Una vez que el robot cambia de forma, permanece estable hasta que otra carga eléctrica lo devuelve a su configuración anterior.

 

Por ejemplo, un robot creado por el equipo tiene cuatro actuadores curvos unidos a las esquinas de un cuerpo del tamaño de un teléfono móvil formado por dos actuadores biestables. Sobre tierra firme, los actuadores curvos actúan como patas y permiten al robot caminar. En el agua, los actuadores biestables cambian la forma del robot, colocando los actuadores curvos en una posición ideal para actuar como hélices y poder nadar.