Diversos sectores y familiares de una estudiante hondureña de enfermería que murió el domingo en una posta policial de La Esperanza, en el occidente del país, por causas desconocidas, protestaron este lunes exigiendo una investigación y justicia, además de afirmar que se trata de un crimen de la Policía.

En la ciudad de La Esperanza, departamento de Intibucá, una manifestación de varias personas fue disuelta con gas lacrimógeno por elementos de la Policía Nacional.

En Tegucigalpa también protestaron estudiantes de enfermería de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah).

La estudiante fallecida es Keyla Patricia Martínez, de 26 años, quien según una versión preliminar de la Policía Nacional, se habría suicidado en la celda en la que fue recluida.

Martínez, según la Policía Nacional, fue detenida hacia las 23:45 horas locales (05:45 GMT) del sábado por escándalo público en estado de ebriedad, acompañada de un médico, violentando el toque de queda que, por la pandemia de covid-19, rige de las 20:00 a las 05:00 (de las 02:00 a las 11:00 GMT).

Una hermana de la víctima, Nancy Carolina Martínez, rechazó las versiones oficiales y acusó a los policías de la posta de La Esperanza de haberla asesinado, además de no haberle permitido que llamara a su familia para avisar que estaba detenida.

La portavoz de la Secretaría de Seguridad, Rebeca Martínez, dijo que durante la ronda de supervisión de las celdas que hacen los agentes, se conoció que la universitaria estaba intentado quitarse la vida, por lo que de inmediato se procedió a trasladarla a un centro médico en un intento por salvarle la vida, donde se informó que había fallecido.

Añadió que el caso fue informado al director general de la Policía Nacional, Orbin Alexis Galo, quien dio instrucciones para integrar un equipo de investigadores para conocer lo sucedido con agentes del Ministerio Público y esclarecer la muerte de la estudiante de enfermería.

Los restos de la universitaria fueron trasladados a Medicina Forense del Ministerio Público en Tegucigalpa, donde el martes serían entregados a su madre, quien llegará procedente de España.

Para hoy también se espera la llegada de otros dos hermanos de la víctima, que viven en Estados Unidos y México.

El jefe de la Dirección de Asuntos Disciplinarios Policiales (Didadpol), Allan Argeñal, dijo que el caso está siendo investigado y que no se puede estar especulando sobre la muerte de la estudiante, sin que se conozcan los resultados científicos de Medicina Forense.

Según Argeñal, desde que se conoció el caso se han coordinado acciones para darle el tratamiento de acuerdo a los procedimientos cuando una persona fallece bajo custodia de la Policía Nacional.