Unos investigadores han resuelto un problema importante para las comunicaciones ópticas inalámbricas, el proceso por el cual se emplea luz para llevar información entre teléfonos celulares y otros dispositivos. Los diodos emisores de luz (LED) pulsan su luz para generar un mensaje codificado que los dispositivos receptores pueden entender.

 

Ahora, un equipo de investigadores con base en Japón ha logrado la combinación ideal de LEDs rápidos y de larga duración. Publicaron sus resultados en la revista Applied Physics Letters.

 

«Una tecnología clave para una modulación más rápida es reducir el tamaño del dispositivo», dijo el autor del artículo Kazunobu Kojima, profesor asociado del Instituto de Investigación Multidisciplinaria de Materiales Avanzados de la Universidad de Tohoku». Sin embargo, esta táctica crea un dilema: aunque los LEDs más pequeños pueden ser modulados más rápido, tienen menos potencia».

 

Otro problema es que las comunicaciones inalámbricas ópticas tanto visibles como infrarrojas pueden tener una interferencia solar significativa, según Kojima. Para evitar la confusión con la luz solar visible e infrarroja, los investigadores se propusieron mejorar los LEDs que se comunican específicamente a través de luz ultravioleta profunda, que puede ser detectada sin interferencia solar.

 

«Los LEDs de ultravioleta profundo se producen actualmente en masa en fábricas para aplicaciones relacionadas con COVID-19», dijo Kojima, señalando que la luz ultravioleta profunda se utiliza para procesos de esterilización así como en comunicaciones ópticas inalámbricas que son ciegas al sol. «Por lo tanto, son baratos y prácticos de usar».