Para visitar el este de República Dominicana, un ciudadano que resida en el norte del país tiene que acceder al Gran Santo Domingo y perder horas en los tapones. Los productos agrícolas que son transportados en un camión desde el sur del país hacia los hoteles de las zonas turísticas pierden calidad ante el congestionamiento de la ciudad.

Aquí es donde radica la importancia de la Circunvalación Santo Domingo, obra que podría estar lista para finales de este año y que significará, en términos de movilidad terrestre, un alivio para el tránsito de la capital dominicana.

Una solución para decir adiós a los tapones

En promedio, cerca de 67,000 vehículos entran cada día al Distrito Nacional desde otras provincias, de esos hay un gran volumen que va para otras regiones.

En un recorrido que realizó un equipo del Listín Diario con el ministro de Obras Públicas y Comunicaciones, Ramón Antonio Pepín del Rosario, y el presidente de la Constructora Rizek (una de las compañías contratistas de la obra), Raúl Rizek, se evidenció el avance del tramo 2B que se ejecuta con un monto presupuestado de US$163 millones del presupuesto de la nación.

Con esta vía se espera que también los vehículos pesados que circulan por el Distrito Nacional para transportar mercancías a otras regiones, utilicen la Circunvalación Santo Domingo, que contará con un peaje que está incluido dentro del Fideicomiso RD Vial.