El ahorro de espacio permitirá crear máquinas más potentes y pequeñas.

Aunque Intel ya presentó su apuesta para portátiles con las nuevas CPU de la gama Core, la compañía todavía tenía guardado un as en la manga con la que poder ofrecer nuevas características a los más entusiastas del hardware. El gigante ha presentado un nuevo chip que sigue formando parte de la octava generación de procesadores Core H, y destacan no sólo por integrar una solución gráfica, sino también por introducir memoria RAM en el módulo.

Este diseño permitirá liberar espacio libre en el diseño de la placa base del equipo, por lo que los fabricantes podrían diseñar portátiles muchísimo más delgados y pequeños, con más espacio para la batería o diseños con soluciones de refrigeración optimizadas. El fabricante por ahora no ha entrado en detalles sobre el rendimiento que ofrecerá esta solución integrada, pero promete que será suficiente para gamers y creadores de contenidos que suele usar programas como Photoshop y Lightroom.

Para ser exactos, el nuevo procesador incluye una solución gráfica de AMD «semi personalizada» y chips de Memoria de Alto Ancho de Banda de segunda generación (HBM2), unos chips que puedes compararse con la GDDR 5. Estos tres componentes son capaces de coexistir entre sí gracias al EMIB, o el Puente de Interconexión Multi Die Integrado de Intel, que permite pasar información rápidamente entre elementos muy próximos.

El módulo tendrá unas dimensiones aproximadas de 7 centímetros y medio cuadrados, y gracias a sus pequeñas dimensiones servirá para dar vida a portátiles potentes para gamers sin necesidad de tener un diseño mastodóntico.

Este nuevo procesador Core H es el primero en usar EMIB y será lanzado en el primer trimestre del 2018, teniendo detrás el interés de muchos fabricantes que quieres empezar a diseñar los nuevos equipos desde ya mismo.