Reese Witherspoon a parte de su pasión por el cine también es una aficionada de la moda. La actriz tiene su propia marca de moda, llamada Draper James, con la que quiso tener un bonito gesto que terminó en demanda.

El pasado 2 de abril la firma de moda de la actriz anunció a través de Instagram que regalaría un vestido a todos los profesores como reconocimiento por la labor que han hecho con los niños durante los días del confinamiento.

“Estimados maestros: Queremos decir gracias. Durante la cuarentena vemos que trabajan más duro que todos para educar a nuestros hijos. Para mostrar nuestra gratitud, a Draper James le gustaría darles a los maestros un vestido gratis«, prometía la marca de la artista en la cuenta de Instagram.

En la publicación aclaraban que para tener el vestido tenían que rellenar un formulario antes de una fecha y que la oferta estaría disponible hasta agotar existencia.

Sin embargo, según publica el portal TMZ, tres profesoras aseguran que el anuncio prometía un vestido para todo el que se suscribiera y no advertía que solo regalarían 250, por lo que han decidido emprender acciones legales en contra de la firma.

En su demanda colectiva, aseguran que el costo total de las prendas en cuestión es menor a los 12.500 dólares, lo que no representaría una suma significativa para una celebridad de la talla de Witherspoon, y que su acción solidaria parece que ha sido solo un truco publicitario para ganar seguidores.

Respuesta de Witherspoon 

La firma de la ganadora del Óscar habló sobre el tema a través de su abogado Theane Evangelis, quien se dirigió a TMZ: “Esta demanda trata de explotar injustamente las buenas intenciones de Draper James de rendir homenaje a la comunidad de profesores ofreciéndoles cientos de vestidos gratis». Y añadió: «El hecho de que las existencias fueran limitadas y que por lo tanto no todos los profesores que respondieron iban a recibir un vestido gratis fue revelado y no constituye motivo de demanda”.