Al menos una persona ha muerto y otra ha desaparecido este viernes al volcar un bote con casi una treintena de refugiados en aguas del mar Egeo, muy cerca de la isla griega de Lesbos.

Según indicó a Efe la Guardia Costera, la operación de rescate comenzó esta mañana tanto en el mar como en tierra firme con la intención de encontrar a tres mujeres desaparecidas.

Dos de ellas fueron localizadas por las autoridades con vida, mientras que de la tercera se pudo recuperar el cadáver.

Aunque en principio los guardacostas buscaban solo a estas mujeres, por la tarde la operación continuó para intentar encontrar a un hombre que conducía el bote cuando éste volcó y que, según algunos testimonios, podría formar parte de la red de traficantes a la que recurrieron los refugiados para realizar la travesía.

Veinticuatro personas consiguieron llegar a la costa de Lesbos esta mañana y, según recogen medios locales, ellos mismos indicaron a los guardacostas que cuando estaban muy cerca de la isla -en el Golfo de Yera-, una explosión ocurrió en el bote y tres mujeres cayeron al agua.

La Guardia Costera no pudo confirmar las edades de los rescatados, aunque sí que son de procedencia somalí.

Grecia está en los últimos meses en el punto de mira de muchas críticas por parte de ONG y organismos internacionales debido a sus presuntas devoluciones ilegales de migrantes a Turquía, en algunos casos con connivencia o incluso participación de la guardia de fronteras europea, Frontex.

El Gobierno griego ha negado categóricamente estas acusaciones -en muchos casos sustentadas por material gráfico y declaraciones de testigos-, que ha calificado de “noticias falsas”, y ha acusado a las ONG de facilitarle el trabajo a los traficantes.