Que la industria sea mucho más proactiva y tome las decisiones sin necesidad de una ley es lo recomendable para el aprovechamiento de los residuos sólidos, así lo planteó ayer el director general de la asociación mexicana Ecología y Compromiso Empresarial (Ecoce), Jorge Treviño Aguado.

Treviño explicó que esto fue lo que se hizo en México, donde de manera voluntaria la industria de bebidas, principalmente de refrescos y agua purificada, decidió tomar acciones concretas para enfrentar el problema de los residuos post-consumo de envases de tereftalato de polietileno (PET).

Indicó que en su país la alta jerarquía del sector industrial decidió atender la situación sin esperar ninguna imposición.

“La decisión tuvo que ser tomada en el top, en las cabezas de la industria, con los dueños, los presidentes, los directores generales…Porque este tema requiere recursos económicos. De otra manera no íbamos a salir ningún lado”, explicó Treviño al participar en el desayuno temático “Economía Circular: Un modelo de negocios basado en el manejo de los residuos plásticos. Aprendiendo de la experiencia de México” organizado por la Asociación de Industrias (AIRD).

Obstáculos
Treviño precisó que si bien lo que funciona mejor es que la industria sea proactiva, también se necesita que el Estado elimine los obstáculos y ofrezca el apoyo que se necesita para fomentar la economía circular.

El presidente de Rizek Vidal Recicladores, Jorge Rizek, manifestó que en el país las empresas dedicadas al reciclaje están muy cargadas de impuestos, a pesar del aporte que realizan al medioambiente. Destacó que su compañía retira mensualmente más de 150,000 libras de plástico.

Rizek planteó que para incentivar este sector las empresas recicladoras necesitan subsidios para la recogida y la compra de la materia prima, o al menos que se les lleve a las plantas, y algunas exenciones fiscales porque pagan impuestos varias veces.

HAY QUE SANCIONAR AL COCHINO
El director general de la asociación mexicana Ecología y Compromiso Empresarial (Ecoce), Jorge Treviño Aguado, planteó que para que los residuos sólidos se puedan aprovechar es fundamental educar a la población para que aprenda a separarlos. También es esencial implementar medidas “que sancionen al cochino”, como se hace en otros países, donde si la gente no separa su basura no se la recogen y si es reincidente le llega una multa a su casa, agregó.