El presidente Nicolás Maduro se alistaba ayer domingo para conquistar el control del Parlamento de Venezuela en unas elecciones boicoteadas por la oposición, sin respaldo internacional, y con centros de votación vacíos.

Más de 20 de los 30 millones de habitantes del país caribeño fueron llamados a las urnas en unos comicios en los que el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) busca la “victoria perfecta” y hacerse con el único poder que desde 2015 controla la oposición liderada por Juan Guaidó.

Los centros de votación, que abrieron a las 10H00 GMT, permanecerán funcionando hasta las 22H00 GMT o hasta que no haya electores, aunque a lo largo del día muchos de estos puntos estaban vacíos o con pocas personas en fila.

“Tuvimos paciencia, la sabiduría para esperar esta hora, este día y sacarnos de encima a esta Asamblea Nacional nefasta (…), que trajo la plaga de las sanciones, de la crueldad, del dolor, del sufrimiento”, dijo Maduro a periodistas tras votar en la principal instalación militar de Caracas, Fuerte Tiuna.

Washington, principal aliado de Guaidó, lidera la presión contra Maduro con sanciones económicas, incluido un embargo petrolero vigente desde abril de 2019.

La Organización de los Estados Americanos (OEA) ha dicho que desconocerá el resultado de ayer domingo. Maduro pidió a “toda la oposición” que “abandone la ruta extremista (…) que le pidamos en una sola voz el levantamiento de todas las sanciones al nuevo gobierno de Estados Unidos de Joe Biden, en una sola voz”. En la barriada 23 de Enero de Caracas, bastión del chavismo, los centros estuvieron más concurridos que en otros sectores de la capital venezolana.

En algunas ciudades, no obstante, había más personas esperando para abastecer combustible que para votar, un reflejo de la crisis económica del país, que según expertos también contribuye a la alta abstención.

 FARSA

El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, calificó ayer de “farsa” y “fraude” las elecciones parlamenta­rias que se realizan en Venezuela, en las que la mayoría de la oposición se abstuvo de participar.

“El fraude electoral de Venezuela ya se ha co­metido”, escribió Pom­peo en Twitter.