A muchos nos llenas de preocupación, ansiedad,… Esto sucede porque, normalmente, envejecer se asocia con cosas negativas, como las arrugas, las canas, el cansancio, se nos olvidan las cosas y los achaques… Salimos con un bulto de medicamentos. Sin embargo, nos a todos les pasa lo mismo al cumplir más de 60 años de edad y hay muchos que no quieren oír hablar de edad…

Hay quienes conservamos nuestra salud física y mental y otros, gracias al progreso de la medicina, hemos podidos tratar nuestras enfermedades y controlar sus síntomas y la tecnología hace que más personas disfruten de una vida larga y saludable…

Debemos envejecer con dignidad, honestidad y respeto y sin perder la alegría.

Esto se logra por nuestra actitud, habilidad y humildad para adaptarnos a esta nueva etapa de la vida y agradecer a Dios de todo corazón por los buenos momentos y años vividos, años dorados y que la felicidad no se encuentra en el dinero, que la corrupción tiene su consecuencia tarde o temprano.

Debemos ser modesto en la madurez reconociendo y aceptar las limitaciones que llegan con los años, en vez de cegarnos a la realidad y saber que quien vive muchos años se hace viejo, no hay vuelta atrás…

Pero es mejor cuando lo que tenemos, lo hemos ganado con nuestro trabajo honesto y con los valores que mañana nos engrandeseran, porque lo que hice, lo hice dentro de mis posibilidades y con equilibrio.

Y después concentrarse en las cosas que si podemos hacer a nuestra edad.

Y no lamentarse de las cosas que ya no podemos hacer.

La lectura, la buena música y el aprendizaje le ayudarán a sentirse mejor y a expandir nuestros horizontes.

Yo como medico, hay cosas que ya no la puedo hacer, debemos ir dejandosela a los más jóvenes y seguir brindando nuestra experiencia que se adquiere a través de los años vividos y nada, ahora que se acerca el 2018..

Si cultivamos la debida actitud y somos capaces de seguir adaptándonos,.. a los años,,, esos momentos que nos brinda la vida serán mejores, con dignidad y sin perder la alegría,…

Gracias señor por todo lo que me has permitido ver y vivir…

Por el Dr. Brigido Montas