La Amazonía perdió 2,3 millones de hectáreas de selva en 2020, un 17 % más que el año anterior, lo que supone el tercer peor registro de los últimos 20 años y el más alto en Bolivia, Ecuador y Perú, según informó el Proyecto de Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP).  

La superficie de bosques amazónicos perdida durante 2020 entre los nueve países vigilados por el MAAP (Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guayana Francesa, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela) es superior a la extensión entera de un país como El Salvador.  

Solo en 2016 y 2017 hubo cifras superiores a la registrada el año pasado, donde a pesar de la pandemia de la covid-19 la deforestación de los bosques amazónicos se ha recrudecido.  

Los países con la mayor cantidad de bosque amazónico primario perdido durante 2020 fueron, por orden, Brasil, Bolivia, Perú, Colombia, Venezuela, y Ecuador.  

Más del 65 % de la deforestación de toda la Amazonía registrada en 2020 se ubicó en Brasil, el país con mayor territorio amazónico, que perdió 1,5 millones de hectáreas, un 13 % más que el año anterior.  

La extensión deforestada en Brasil es casi el doble de la superficie total de Puerto Rico, se concentra principalmente en el sur y es la sexta cifra más alta de los últimos 20 años en el país.

Desde las imágenes de satélite observadas, las áreas deforestadas en Brasil fueron primero taladas y luego quemadas, lo que causó grandes incendios por la abundante biomasa recientemente cortada, en una práctica aparentemente ligada a la expansión de pasto para ganado.