El arte rupestre recientemente descubierto en cuevas del norte de España representa un estilo cultural artístico común en la Europa antigua, pero desconocido hasta ahora en la Península Ibérica, según un estudio publicado en la revista de libre acceso PLOS ONE por Diego Gárate del Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria, España, y sus colegas.

 

La historia del arte humano antiguo incluye varios complejos culturales caracterizados por diferentes estilos y convenciones artísticas. En 2015, se descubrieron nuevos ejemplos de arte rupestre en tres cuevas en el Cerro de Aitzbitarte, en el norte de España, que representan un estilo artístico previamente desconocido en la Península Ibérica. En este estudio, Gárate y sus colegas comparan este estilo artístico con otros de toda Europa.

 

Las obras artísticas de las cuevas de Aitzbitarte consisten en su mayoría en grabados de bisontes, con los característicos cuernos y jorobas de tales animales. Los autores destacan el estilo particular en el que se dibujan los cuernos y las patas de los animales, típicamente sin la perspectiva adecuada. Los pares de extremidades se representan sistemáticamente en forma de «doble Y» con ambas patas visibles, y los cuernos se dibujan igualmente uno al lado del otro con una serie de líneas en medio.

 

Esto es consistente con el estilo artístico del complejo cultural gravetiense, caracterizado por una serie de costumbres específicas en el ámbito del arte, las herramientas y las prácticas de enterramiento, aparecidas hace entre unos 34.000 y 24.000 años. Esta cultura es conocida en toda Europa, pero no se había visto antes en la Península Ibérica. Los autores combinan este nuevo descubrimiento con datos de toda Europa para mostrar que la cultura gravetiense estaba más extendida y era más variada de lo que se había apreciado anteriormente.