Envueltos por una cortina de espeso humo, como una neblina que obstruía en gran medida su visión, brigadistas del Cuerpo de Bomberos de Haina trabajaban arduamente para apaciguar el fuego iniciado el pasado miércoles en el vertedero de Haina.
Durante más de 48 horas seguidas, tanto los bomberos como otras instituciones han colaborado para extinguir el incendio que, según señalaron, han sofocado en un 50 por ciento.
Con mascarillas, botas, tanques de oxígeno e instrumentos varios para mover basura y apagarla, personal de los bomberos se mantenían en constante actividad para apagar el fuego. Sin embargo, entre ellos, decenas de personas de la zona mantenían sus trabajos de ‘buzos’ en el basurero.
La zona incendiada se mostraba como una “oportunidad” para las personas que realizan esta labor, según el jefe de bombero de Haina, Manuel María.
“Estos son los momentos que ellos aprovechan. Ayer estaban toditos aquí, porque cuando llega la basura o se quema, a veces quedan cosas abajo, como hierro o metal que ellos lo recogen y lo venden”, dijo.
La zona afectada, de aproximadamente 400 a 500 metros cuadrados y donde hubo llamas de hasta de 8 metros, se mantiene en un ambiente en el que el humo provoca dificultades para respirar, ver, y hasta vivir en ese lugar, pero los moradores de la zona alegaban estar “acostumbrados” a estas condiciones.Lo que se podría considerar inhóspito es “lo normal” para los ‘buzos’ y las personas que habitan en las proximidades del vertedero, comenta Manuel María, quien dice que, a pesar de las advertencias de los bomberos, las personas se mantienen buscando materiales para vender entre los desechos quemados, rodeados de una cortina de humo.
Una “chispita”
La quema de desechos es una práctica constante en el vertedero de Haina, pero nunca se pensó que fuera a descontrolarse de tal manera, alega uno de los trabajadores del lugar, quien prefirió mantener el anonimato. “Había una chispita de candela por ahí; yo mismo le pasé por al lado, pero las autoridades y nosotros no les hacíamos caso a eso. Era una mínima cosa y se prendió, un descuido total que hizo que todo el mundo viera el humo”, comenta el trabajador del vertedero a periodistas de Listín Diario.
Otro de ellos, que se añadió a la conversación, agrega que también había visto la “chispita”, tras decir que se forma a veces por el mismo calor y el cúmulo de ciertos materiales que son propensos a quemarse con facilidad.
No obstante, culpó de la magnitud del fuego al factor viento: “Cuando se meten tiempos de brisa, que sopla y saca todo lo de abajo, eso hace que pueda provocar que una chispita se vuelva más grande”.
A pesar de que los trabajadores de la zona mantienen la versión de que fue una “chispita” el alcalde de Haina opina que fue provocado por “manos criminales” y que tomará entre 10 y 12 días poder extinguirlo.
Mientras tanto, las personas en los alrededores, se mostraban indiferentes a la cortina de humo que inundaba sus viviendas, su zona de trabajo y al daño que este podría hacer a su salud.Desde niños, hasta personas mayores,
Afecta la salud.
Mientras tanto, las personas en los alrededores, se mostraban indiferentes a la cortina de humo que inundaba sus viviendas, su zona de trabajo y al daño que este podría hacer a su salud.
El jueves pasado.
Fue preciso despachar los estudiantes de una estancia infantil y una escuela cercana al vertedero debido a la contaminación.
