La repentina muerte de Chadwick Boseman, ha causado una terrible conmoción en Hollywood. El protagonista de ‘Black Panther’ falleció el 28 de agosto, víctima de un cáncer de colon. Gran parte de esa conmoción viene causada porque su fallecimiento ha sido una sorpresa, muy poca gente sabía que Boseman estaba enfermo y que llevaba luchando contra el cáncer desde 2016.

Michael Greene, el agente de Boseman, ha dado una explicación de por qué el intérprete no quiso revelar, ni siquiera a su entorno laboral, su padecimiento. En gran parte, fue por consejo de su madre. «[Ella] siempre le enseñó a no dejar que la gente se preocupe por él», ha comentado en una entrevista para The Hollywood Reporter.

Boseman luchó en secreto contra el cáncer, puesto no reveló ni a Marvel ni a Disney su situación. Tampoco se lo comentó a cineastas amigos, como Ryan Coogler o Spike Lee, que declararon que no tenían ni idea de los problemas de salud del actor. Hasta los días finales, Boseman estuvo convencido de que iba a recuperarse, estuvo preparando la secuela de ‘Black Panther’ hasta el último momento.

«También sentía que, en la industria, la gente podía equivocarse con algunas cosas, era una persona muy reservada», agregó Greene. Esto significa que el intérprete tuvo problemas de salud que guardó en secreto mientras rodaba, como fue el caso de ‘Ma Rainey’s Black Bottom’, una de sus últimas películas, que se estrenará en Netflix a finales de año.

«ESTABA SUFRIENDO MUCHO»

«Realmente, estaba sufriendo mucho», detalló Greene sobre el rodaje de este proyecto. «Pero sintió que poder coprotagonizar con Denzel Washington esta película y formar parte de este ciclo de August Wilson en Netflix era muy emocionante para él», añadió.

Además de ‘Ma Rainey’s Black Bottom’, Boseman tenía pendiente otros proyectos que aún no había rodadoa, como la secuela de ‘Black Panther’ o ‘Yasuke’, un filme que iba a protagonizar y producir sobre el único samurái conocido del siglo XVI cuya ascendencia era africana.