El hijo del presidente de Angola participa en una subasta benéfica y deja medio millón de dólares.

Incluso para ser generoso hay que saber. Eduarde Danilo Dos Santos no lo sabía. Él creía hacer el bien cuando donaba 500.000 euros en una de esas subastas benéficas que organizan los ricos para descargar su conciencia. El lugar era nada menos que Cannes, durante el festival de cine, y el conductor de la subasta, nada menos que el gracioso actor norteamericano Will Smith. Por supuesto no faltaban flashes, fotos y vídeos y todas las estrellas del cine.

El magnánimo Eduarde Danilo Dos Santos no es un cualquiera, pero eso Will Smith no lo sabía cuando, inocentemente, recibió al ganador de la subasta y, al verlo, le soltó: “¿No eres demasiado joven para tener 500.000 euros?”. La carcajada fue general, pues también el público desconocía la identidad del joven.

Danilo Dos Santos, es el hijo más joven del presidente angoleño Eduardo Dos Santos (38 años en el poder) y hermanastro de Isabel Dos Santos, la mujer más rica de África.

Danilo tiene 25 años, estudia en Inglaterra varias cosas aunque ninguna acaba y toca la guitarra, es decir, que Will Smith, sin quererlo, había hecho la pregunta pertinente: ¿No eres demasiado joven para tener 500.000 euros?

La subasta dirigida por Smith y Jessica Chastain recaudaba fondos para la fundación amfAR, creada por Elizabeth Taylor en 1985 con el fin de investigar la curación del sida. Es ya una cita clásica en el festival de cine, donde hay que pagar mucho dinero solo por asistir. Gracias a su generosidad, Danilo pudo además subir al escenario y abrazarse a Smith y Chastain.

El gesto de Danilo saltó a las redes sociales angoleñas y no para agradecerle el gesto. Los críticos le recuerdan que mejor hubiera sido donar ese dinero directamente a los hospitales de su país, que carecen de los más elementales remedios —de jeringuillas a suero— Angola es uno de los países del mundo con mayor mortalidad infantil. Con los 500.000 euros se hubieran salvado esa misma semana una decena de vidas de niños (en el primer trimestre murieron por malnutrición más de 400).

Danilo contestó a las críticas, pidió perdón con la fórmula de “si alguien se ha sentido ofendido” y recordó que las obras compradas van para su fundación Espírito de Criança y que se exhibirán en museos del país. “A veces podemos no ser comprendidos de manera correcta”, dice en su cuenta de Facebook, “y nuestras acciones sacadas de contexto, y distorsionadas, pero tengan seguro que por mi parte hago de todo para ayudar a mejorar la calidad de vida de los angoleños y siempre con amor y respeto a mi prójimo”.

El alarde del hijo generoso no ha podido ocurrir en peor momento, con su padre en Barcelona tratántose de un cáncer y su país en vísperas electorales.