El camión de la patrulla policial circula por la avenida México de la capital, cargando una docena de personas que han desoído el toque de queda dispuesto por el Gobierno para prevenir el contagio del Covid-19.

A una esquina, en la acera, un hombre y una mujer vociferan groserías a las autoridades, se mofan de ellos y los desafían a que los atrapen, levantando los brazos y haciendo gestos con la lengua.

Cuando los agentes policiales toman la vía de retorno por la intersección de la calle Emilio Prud Homme, para estacionarse frente al Club San Carlos, los burlones huyen despavoridos por los callejones de los sectores aledaños como si se tratara de un juego entre el gato y el ratón.

Así ha sido desde el 20 de marzo, fecha cuando entró en vigencia el toque de queda que, en principio, era desde las 8:00 de la noche, pero que posteriormente fue prolongado desde las 5:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana.

Muchos de los apresados alegan ser trabajadores informales que no tienen qué comer y, por tanto, violan la medida en busca de alimentos ya que, según ellos, están abandonados a su suerte.

Otros justifican su violación porque ignoraban el decreto emitido por el presidente Danilo Medina, sobre la extensión del horario en que la ciudadanía podía circular.

Mientras, en las barriadas, los jóvenes juegan “bitilla” despreocupados y se sientan en las esquina, como siempre acostumbran los fines de semana. Algunos colocan las bebidas alcohólicas en las aceras, ponen sus sillas plásticas cerca del contén y vislumbran el fantasmagórico paisaje que otorga la disposición del Poder Ejecutivo.

Los niños en las calles
Y por si fuera poco, siete niños en edades de entre 9 y 11 años juegan en las cercanías del Puente Duarte, lanzan piedras cerca de la avenida París, casi a 300 metros de un retén de agentes policiales que custodian la entrada y salida de vehículos.

Al percatarse de que los periodistas de Listín Diario captan imágenes del lugar, los menores de edad corren en vía contraria para evitar ser descubiertos por las autoridades que se encuentran en los alrededores del puente.

Según los oficiales de la ley, cuando un niño es atrapado violando el toque de queda, sin un adulto que lo acompañe, inmediatamente es trasladado a su hogar para entregárlo a sus padres, ya que estos son los principales responsables de su destino.

El confinamiento
Los apresados se desmontan del camión policial y se les ordena que hagan una fila frente a la puerta principal del pabellón del CluSan Carlos. A continuación se les pide que se despojen de sus correas y de cualquier material o herramienta de metal que pudiera provocar un problema.

Detrás de la puerta, conformada por barrotes de corte carcelario, están las personas que ya tienen varias horas confinadas y que saben que verán el amanecer en ese salón deportivo, lejos de sus familiares y allegados.

La mayoría de los privados de su libertad son hombres. Solo hay dos mujeres que serán trancadas en la segunda planta del complejo deportivo para estar separadas de los demás.

Medidas
El presidente Medina había instado a la población dominicana a “quedarse en casa” para ayudar a las autoridades a frenar la propagación del Covid-19. No obstante, recientemente dispuso ampliar el horario del toque de queda hasta el 3 de abril de este año.

Durante las jornadas que esta disposición gubernamental ha estado vigente, más de 10,000 personas han sido detenidas.

Un toque de queda es la medida que establece un gobierno en situaciones excepcionales para limitar la libre circulación por las calles y la permanencia en los espacios públicos.

Las demarcaciones donde más se producen estas detenciones son Santiago de los Caballeros, La Romana, el Gran Santo Domingo y Baní.

1
PRIMER DÍA

Las autoridades apresaron a 1,714 personas violando toque de queda.

2
AUMENTO

Durante el segundo día la cantidad de personas apresadas aumentó a 2,102.

3
INDISCIPLINA

A pesar de las campañas preventivas, en tercer día apresaron a 1,911

4
DISMINUCIÓN

En la cuarta jornada, la Policía Nacional registró a 1,359 detenido.

5
PROMEDIO

Durante el quinto día de toque de queda fueron apresadas 1,320 personas.