A  10 meses de conocerse por primera vez la existencia del virus  SARS-CoV-2  que produce la enfermedad conocida como COVID-19, han sido creadas diferentes herramientas  diagnósticas que permiten identificar su presencia,  muchas de esas técnicas están presentes en República Dominicana.

Aunque la más utilizada es la prueba conocida como PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa) por sus siglas en inglés, aprobada desde el inicio como la más certera para el diagnóstico del virus, en el país se han ido introduciendo otros métodos diagnósticos que han permitido ampliar el espectro de opciones.
Además de ésta se utilizan las pruebas tomadas de muestras de saliva, y las de sangre para la determinación de anticuerpos.

Las PCR es una prueba molecular que certifica la presencia del virus y las muestras se toman con hisopado nasal. Hasta la fecha el país ha procesado 419,327 muestras diagnósticas, de las cuales 103,660 han dado positivas y 315,667 negativas.
 
Aliento
 La más reciente que será introducida a la gama de opciones diagnósticas del COVID-19 del país, es la prueba de aliento de origen israelí que será aplicada en aeropuertos y hoteles básicamente para el control del virus en el sector turístico. 

 Se trata de un método no invasivo, donde la persona sopla de tres a cinco veces en un tubo, obteniéndose los resultados en 20 minutos.

 Un estudio científico realizado en  el país para avalar su eficiencia comprobó que la prueba tiene resultados de especificidad en un 95% y de sensibilidad de 89% comparada con la de PCR. Las autoridades sanitarias han informado que han obtenido 425 mil pruebas de ese tipo.
 
Prueba de saliva
Aunque en abril pasado  las autoridades nacionales informaron que el país era  pionera en el uso de muestras de saliva para detectar el nuevo coronavirus, el método no se ha generalizado. No obstante hay instituciones que la están utilizando como herramienta diagnóstica. Para tomar la muestra el paciente debe escupir en un envase hasta alcanzar una medida previamente establecida.

La misma se une a la prueba molecular, que descubre la genética del virus, y la rápida o serológica, que descubre los anticuerpos que produce el cuerpo en defensa al virus.
 
Pruebas rápidas

Otras pruebas que también se aplican desde el inicio de la epidemia son las denominadas rápidas, como son la IGM e IGG en sangre y miden anticuerpos; las primeras son de primera línea de defensa y  dice que hay una infección activa que el cuerpo está peleando, y el IGG es una segunda línea de defensa y  dice que ya la persona se expuso a ese virus y su cuerpo tiene otro tipo de inmunidad.
 
En tiempo real
El Laboratorio Clínico Referencia, el centro privado que mayor cantidad de muestras diagnósticas del virus de COVID ha procesado en el país, explica los diferentes métodos o determinaciones diagnósticas que  utilizan actualmente en el país.

Cita que  la  determinación SARS-CoV-2 (2019-nCoV) PCR en Tiempo Real se utiliza para facilitar el diagnóstico de la infección por el 2019-nCoV,  para orientar las decisiones de tratamiento y manejo clínico de casos confirmados y  para la vigilancia epidemiológica y es procesado por el Departamento de Biología Molecular.

Realizan también la  determinación ANTI-SARS-CoV-2 Totales que  es un inmunoensayo destinado a la detección cualitativa de anticuerpos contra el SARS-CoV-2. La prueba está diseñada para usarse como una ayuda en la identificación de individuos con una respuesta inmune adaptativa al SARS-CoV-2, indicando infección reciente o previa.

 Además del  ANTI-SARS-CoV-2,  IgG Cuantitativa que es  un ensayo inmunológico para la determinación cuantitativa de anticuerpos IgG específicos anti-S1 y anti-S2 contra el SARS-CoV-2.

Este ensayo, explica Referencia Laboratorio Clínico está indicado para utilizarse como ayuda en el diagnóstico de COVID-19 y para facilitar el estudio inmunitario de los pacientes infectados proporcionando una indicación de la presencia de anticuerpos IgG.

 No debe utilizarse como único criterio para diagnosticar o excluir la infección por SARS-CoV-2 ni para informar sobre el estado de la infección.