Las autoridades de Corea del Norte han reiterado este martes su llamamiento a Estados Unidos para que devuelva un buque de carga incautado por Estados Unidos por presuntamente violar las sanciones internacionales contra Pyongyang.

El representante permanente del país ante Naciones Unidas, Kim Song, ha dicho que Washington «debería deliberar y pensar sobre las consecuencias que este acto indignante podría tener sobre los desarrollos en el futuro».

Así, ha recalcado que Estados Unidos «debe devolver el buque de carga sin demora» y ha agregado que Pyongyang «vigilará de cerca todos los movimientos estadounidenses», según ha recogido la agencia surcoreana de noticias Yonhap.

Kim ha condenado «en los términos más firmes» lo sucedido y ha argumentado que «es un producto de la política de hostilidad extrema de Estados Unidos hacia Corea del Norte».

«Las sanciones unilaterales y la aplicación extraterritorial de la jurisdicción nacional de un tercer país no pueden ser justificados en ningún caso y bajo ninguna circunstancia, según el Derecho Internacional», ha zanjado.

El Departamento de Justicia de Estados Unidos dijo a principios de mayo que había incautado un buque de carga de Corea del Norte acusado de envíos de carbón ilícitos, violando de las sanciones.

Funcionarios del Departamento de Justicia de Estados Unidos afirmaron que el buque norcoreano, conocido como ‘Wise Honest’, estaba siendo confiscado a Samoa Americana. El anuncio se produjo horas después de que Corea del Norte lanzara dos misiles de corto alcance.

El líder norcoreano, Kim Jong Un, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, celebraron una cumbre sin precedentes el 12 de junio de 2018 en Singapur y se comprometieron a establecer nuevas relaciones y un régimen de paz en la península de Corea. Celebraron una segunda cumbre en Vietnam en febrero, que se finalizó sin acuerdo.