Collin Peterson, de Minnesota, y Jeff Van Drew, de Nueva Jersey, fueron los únicos representantes demócratas que este jueves rompieron filas con su partido y votaron en contra de la resolución que asentará los procedimientos de la investigación pública y formal para el juicio político del presidente Donald Trump.

Desde hace tiempo, ambos congresistas han venido mostrando resistencia a someter al mandatario estadounidense a un impeachment. Además, los dos demócratas representan distritos en los que Trump ganó las elecciones presidenciales de 2016. En el segundo distrito de Nueva Jersey, Trump ganó con el 50.6% de los votos. En el séptimo de Minnesota, lo hizo con un 61.4%.

Drew cree que “sin apoyo bipartidista, […] esta investigación dividirá aún más al país, lo hará pedazos y finalmente fracasará en el senado”. Sin embargo, según Axios, Drew también supo reconocer los méritos que el proceso ya había alcanzado: “Tomaré una decisión personal en función de las pruebas presentadas tras estas investigaciones.

Por su parte, Peterson cree que “este proceso de juicio político sigue siendo totalmente partidista“. El legislador asegura haber estado meses escuchando las opiniones de sus electores en esta materia pero que “el recrudecimiento de llamadas la semana pasada me muestra cuán dividido está nuestro país en este momento”.

El de Minnesota considera que la votación de este jueves es “innecesaria y [ha sido] ampliamente distorsionada por el partido republicano y en los medios de comunicación [que han hablado de] juicio político”. Él asegura que no tomará una decisión sobre el juicio político hasta que se hayan presentado todos los hechos.

Axios resalta la “impresionante” labor de la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, que consiguió bajar de siete a dos el número de representantes demócratas críticos con buscar la destitución del presidente.