Identificado como Xavier X, un técnico que trabajaba para la compañía francesa de construcción ferroviaria TSO, se desplazó de la provincia de Vernouillet a la ciudad de París en un viaje de trabajo, pero murió al tener sexo durante su estancia. Ahora, la corte ordenó a la compañía indemnizar a su familia por “accidente laboral”.

El hombre, que estaba casado al momento del incidente, fue encontrado muerto en su habitación de hotel poco después de tener sexo con una mujer francesa que acababa de conocer.

Según un reporte del Times de Londres, Xavier X sufrió un infarto que terminó con su vida en febrero de 2013. Desde entonces, su familia ha librado una batalla legal para lograr la indemnización por parte de TSO argumentando que tener sexo es algo tan natural como ducharse o comer, por lo que el hombre habría sufrido el equivalente a un accidente de trabajo.

El tribunal francés determinó finalmente que TSO debe indemnizar a la familia de Xavier X con el 80 por ciento de su salario mensualmente hasta lo que habría sido su edad de jubilación y, posteriormente, con un porcentaje de su pensión.

TSO luchó con todos sus medios para demostrar que el hombre no estaba en cumplimiento de su deber cuando sufrió el infarto durante el “acto sexual adúltero que tuvo con una completa desconocida“, pero la corte dictaminó que un empleado en un viaje de trabajo “tiene derecho a la protección de su empleador durante la duración de su misión, ya sea que el accidente tenga lugar como parte de una actividad profesional o como un acto de la vida normal”.