Los pacientes con diabetes tipo 2 mejoran su capacidad para regular los niveles de azúcar en la sangre si comen alimentos con un contenido reducido de carbohidratos y una mayor proporción de proteínas y grasas. Esto lo demuestra un estudio reciente realizado en el Hospital Bispebjerg en colaboración con, entre otros socios, la Universidad de Aarhus y el Departamento de Nutrición, Ejercicio y Deportes de la Universidad de Copenhague. Los hallazgos son contrarios a las recomendaciones dietéticas convencionales para los diabéticos tipo 2.

La terapia nutricional es importante para tratar la diabetes tipo 2 de manera óptima, pero las recomendaciones no están claras. Según la autoridad de salud danesa, hasta el 85% de los pacientes recién diagnosticados con diabetes tipo 2 tienen sobrepeso y, por lo general, se les recomienda seguir una dieta centrada en la pérdida de peso: que contenga menos calorías de las que queman, bajo contenido de grasa y alto contenido de carbohidratos con un bajo ‘índice glucémico’ (que indica qué tan rápido un alimento afecta los niveles de azúcar en la sangre).

 

Un aspecto central en el tratamiento de la diabetes tipo 2 es la capacidad del paciente para regular sus niveles de azúcar en la sangre, y una nueva investigación ahora indica que una dieta con un contenido reducido de carbohidratos y una mayor proporción de proteínas y grasas mejora la capacidad del paciente para regular su sus niveles de azúcar en la sangre en comparación con las recomendaciones dietéticas convencionales. Además, reduce el contenido de grasa en el hígado y también tiene un efecto beneficioso sobre el metabolismo de las grasas en los diabéticos tipo 2.

 

«El propósito de nuestro estudio fue investigar los efectos de la dieta sin ‘interferencia’ de una pérdida de peso. Por esa razón, se les pidió a los pacientes que mantuvieran su peso. Nuestro estudio confirma la suposición de que una dieta con un contenido reducido de carbohidratos puede mejorar la capacidad de los pacientes para regular sus niveles de azúcar en la sangre, sin que los pacientes pierdan peso simultáneamente «, explica el consultor principal, DMSc Thure Krarup, MD, del Departamento de Endocrinología del Hospital Bispebjerg. Continúa: «Nuestros hallazgos son importantes, porque hemos eliminado la pérdida de peso de la ecuación. Estudios anteriores han proporcionado conclusiones contradictorias, y la pérdida de peso tiene interpretaciones complicadas en varios de estos estudios».