Roberto Valenzuela

ELGRAFICODELSUR.COM.–  Esto ocurrió en MOCA, el 3 de abril de 1805, cuando las tropas haitianas se retiraban a Haití, desde la colonia del Santo Domingo del Este. Es un episodio poco conocido, aunque los historiadores del régimen trujillista lo comparaban o querían igualar con la matanza de haitianos de 1937.  Se conoce en la historia  como “El Degüello” o “La Matanza de Moca”.

Los haitianos huían por la resistencia de las fuerzas francesas del general Eugene Ferrand.  Los haitianos, según un artículo del periodista e historiador Héctor Ticneo, después de haber saqueado y quemado las comunidades de Monte Plata, Cotuí y La Vega, se dirigieron a Moca, donde pasaron a cuchillo a sus habitantes y luego incendiaron las viviendas.

Explica que una versión histórica resalta que  todo el que cayó en Moca en manos de los haitianos fue degollado, y la ciudad fue incendiada al extremo de que los altares de la Iglesia, los archivos y el reloj público de la ciudad fueron reducidos a cenizas. Sólo salvaron la vida dos personas, porque sus cuerpos quedaron ocultos debajo de la pila de cadáveres que dejaron a su paso las tropas haitianas en su marcha de regreso a  Haití.

Además de Moca, los haitianos llevaron a cabo matanzas en Santiago y San José de las Matas.

Los haitianos habían rodeado la ciudad de Santo Domingo, que estaba en manos de los franceses, el 8 de marzo de 1805.

Las tropas haitianas eran comandadas por los generales Enrique Cristóbal y Jaques Dessalines, quienes tenían el propósito de desalojar de la isla a las fuerzas de Francia que comandaba el general Eugene Ferrand.

En el momento que se produjo la entrada de los haitianos, los franceses estaban listos para la resistencia. Incluso, el general Ferrand había preparado la defensa de la plaza e incendió el poblado de San Carlos y elevó la muralla.

Además, el jefe militar Francés hizo acopio de víveres y armó para la guerra a la población hábil, la cual llegó a 2 mil hombres.

Los haitianos mantuvieron el cerco durante tres semanas, pero no lograron la rendición de los franceses, quienes se mantuvieron en pie hasta que llegaron refuerzos de Francia, lo que obligó a los comandantes haitianos a retornar sus tropas a Haití, porque temieron las escuadras francesas se dirigieran hacia el Oeste a retomar su antigua colonia.

El 26 de marzo de 1805, los haitianos se impresionaron al ver barcos franceses que iban en dirección al Oeste y pensaron que se dirigían a su antigua colonia de Haití, por lo que decidieron retirarse de la ciudad de Santo Domingo, para regresar a su país. En su ruta robaron y masacraron a poblaciones indefensas, pero lo más grave ocurrió en Moca, donde asesinaron a toda su población. Fuente: Diario Dominicano/Cultura.