La agencia de Inmigración y Control Aduanas (ICE) planea ampliar su proyecto para espiar teléfonos a través de un millonario acuerdo con la empresa israelíe Cellebrite.

Esa empresa israelí es conocida por su experiencia en la extracción de datos, es decir “hackear” los teléfonos y descargar datos de todas sus aplicaciones para ser utilizadas en investigaciones, reportó The Daily Beast.

Según una reciente presentación federal, ICE pagará a Cellebrite entre $30 y $35 millones de dólares por “dispositivos de extracción forense universal” (UFED) y “licencias de accesorios, capacitación y servicios de apoyo”.

Esos montos revelan la importancia que la agencia está dando a este tipo de tecnología para sus investigaciones de inmigración, narcotráfico, tráfico de personas y otro tipo objetivos.

“La solicitud se originó en la oficina de ICE en Dallas, según un aviso de intención publicado el 24 de junio”, apunta el reporte. “La sinopsis del contrato también establece que las Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) y su Centro de Delitos Cibernéticos (C3) planean usar la tecnología de Cellebrite. Dentro de ICE, HSI lidera investigaciones sobre tráfico de niños, contrabando de drogas y fraude”.

El Beast afirma indica que una tecnología de ese tipo se vende por $5,000 y hasta por $15,000 dólares, lo que significa que ICE podría comprar hasta 6,000 equipos de Cellebrite para sus acciones.

El reporte no indica qué uso dará ICE a la tecnología de Cellebrite y dónde lo hará y la agencia se negó a dar información.

El portal señala que en 2017, los oficiales de Aduanas y Control Fronterizo (CBP) revisaron los dispositivos de más de 30,000 viajeros internacionales en 2017, pero ICE no revela esos datos.