Manifestantes iraníes desafiaron una fuerte presencia policial ayer para protestar contra los días de negación del gobierno de su país sobre que derribó un avión de pasajeros con 176 personas a bordo, el disturbio más reciente en sacudir la capital iraní en medio de crecientes tensiones con Estados Unidos.

Unos videos publicados en internet mostraron a los manifestantes gritando consignas contra el gobierno y moviéndose a través de estaciones de metro y acercas, muchas cerca de la plaza de Azadi, luego de que horas antes se convocó a la gente para protestar ahí. Otros videos sugirieron que protestas similares se llevaban a cabo en otras ciudades iraníes.

Policías antimotines con prendas negras y cascos se habían congregado en la Plaza de Vali-e Asr, en la Universidad de Teherán y otros lugares emblemáticos.

Miembros de la Guardia Revolucionaria patrullaban en motocicletas y agentes vestidos de civil recorrían la ciudad. La gente miraba al suelo al pasar deprisa junto a la policía, tratando de no llamar la atención.

Las 176 personas que iban a bordo, en su mayoría iraníes y canadienses-iraníes, murieron al estrellarse el avión.

Los iraníes han expresado su indignación por el derribo del avión y las explicaciones engañosas de las autoridades ofrecidas tras la tragedia.

También han expresado su dolor por los fallecidos, entre los que había muchos jóvenes con futuros prometedores que estudiaban en el extranjero.